lunes, 16 de noviembre de 2015

Top Campanarios de España

Todos sabemos para que se usan hoy en día los campanarios. Los hemos visto por toda la geografía española, ya sea en una ciudad grande o en un pueblo pequeño, unos más grandes otros más pequeños nos han avisado de misas, matrimonios, funerales… ¿pero sabíais estos usos?:

Antiguamente las campanas señalaban también:
  • ·         las incursiones de los piratas
  • ·         los incendios
  • ·         el toque de queda
  • ·         la peste



Está claro que en tiempos en los que no se tenía la información al alcance de la mano, como tenemos hoy en día, los campanarios y sus avisos tenían una función muy importante. Es por eso que hoy en Buscando el Destino Perdido le hacemos un pequeño homenaje repasando los campanarios más bonitos de España.

¡Comenzamos!

La Giralda – Sevilla





















En su cúspide se halla una bola llamada tinaja sobre la cual se alza el Giraldillo, estatua que hace las funciones de veleta y que fue la escultura en bronce más grande del Renacimiento europeo y que por extensión vino a denominar a toda la torre.

Con sus 104,1 m de altura (incluido el remate superior), fue durante siglos la torre más alta de España, así como una de las construcciones más elevadas y famosas de toda Europa (por comparación; la Torre de Pisa mide 55,8 m y el Big Ben 96,3 m).

El Micalet – Valencia




La torre del Miguelete es el campanario de la catedral de Valencia. Se conoce como El Miguelete o Torre del Micalet en valenciano.

El Miguelete es una torre de estilo gótico levantino, tiene 51 m de altura hasta la terraza, los mismos que mide su perímetro, y 63 m en total. Tiene forma de prisma octogonal y posee 207 escalones.

Iglesia de San Clemente de Taull – Lleida



San Clemente de Tahull (en catalán, Sant Climent de Taüll), es una iglesia románica de planta basilical perfecta.

La torre campanario es cuadrada y está exenta, aunque edificada muy cerca del grueso del edificio, en el ángulo del muro sur, junto a la cabecera. Es alta y esbelta, como todas las torres lombardas levantadas en el valle de Bohí. Corresponde al grupo de torres contemporáneas de las italianas edificadas en el siglo XII, que se construyeron mucho más elegantes que las de la etapa anterior.

Iglesia de Santa Catalina – Valencia





















El campanario fue construido entre 1688 y 1705 por Juan Bautista Viñes, cuyo nombre aparece grabado en una lápida conmemorativa que podemos ver en su base. Obra maestra del barroco valenciano, es de planta hexagonal y su alzado se divide en cuatro pisos separados por molduras, más el cuerpo de campanas y el remate superior. En su origen se le llamó campanar salomónico por las columnas helicoidales que adornan esa parte alta. Destaca asimismo por los resaltes a modo de pilastras que adornan sus ángulos y por la decoración de sus ventanas, donde el estilo decorativo del barroco efímero se trasladó con maestría a la piedra. Alcanza los 56,12 m de altura.


Torre románica de San Esteban – Segovia






















Esta torre campanario presume ser la mejor del románico español, llamado "reina de las torres bizantinas".

Mide 56 metros de altura y se alza mediante seis cuerpos superpuestos de los cuales cinco están animados con arquerías ciegas o ventanales con profusión de arquivoltas y columnas y magníficas tallas donde predomina el bestiario románico: aves, arpías, grifos, etc.

Campanario de la Catedral de Oviedo





















A pesar de encontrarse ya en la época Renacentista, aún perduro el estilo gótico en el que fue construida en su mayoría. El pórtico que la encabeza consta de poca altura, además de tres arcos y puertas que dan acceso a las naves. La caracteriza una torre de estilo gótico y renacentista presidida por un campanario. Dicho campanario se compone de tres campanas, en las que la más destacada es la Wamba, por ser la más antigua en funcionamiento de España.


Torre de la Magdalena – Zaragoza





















La torre semeja los alminares almohades, con dos cuerpos cuadrados concéntricos entre los que sube una escalera con cubrición de bóveda de aproximación o falsa bóveda, imitando las soluciones constructivas de la torre de San Martín de Teruel. La torre interior alberga varios pisos de habitación cubiertos con bóveda de arista. Al exterior presenta tres cuerpos separados por impostas con decoración de cerámica vidriada blanca y verde, arcos mixtilíneos, ventanas en arcos túmidos y de herradura.


Campanario de la Mezquita – Córdoba




















La construcción de la Torre Campanario de la Catedral se llevó a cabo en varias fases sobre el antiguo Alminar de Abderraman III.  La primera se realizó en 1593 conforme a la traza del maestro Hernán Ruiz III. Posteriormente, la obra fue continuada al trazar el segundo cuerpo en el año 1616, trabajo realizado por el maestro Juan Sequero de Matilla. Posteriormente, en 1636 se le añade el tercer cuerpo y en 1664 la figura de San Rafael. Hoy en día la Torre contiene en su interior los restos del Alminar de Abderramán III construido en los años 951-952.

Campanario mudéjar – Teruel





















La torre mudéjar, comienza a erigirse en 1257 y en su cuerpo inferior se abrió un paso en forma de bóveda de cañón apuntado para uso de los transeúntes. Es una de las torres mudéjares más antiguas de España. Es de planta cuadrada y posee tres cuerpos profusamente decorados con azulejos y cerámica vidriada. Remata en una linterna octogonal del siglo XVII.


Iglesia de San Juan Bautista  de Alcalà de Xivert – Castellón






















La torre de casi 70 metros de altura es de planta octogonal, y presenta tres cuerpos separados por una sencilla cornisa, más el cuerpo de campanas y el templete de remate con una profusa decoración. El acceso, se encuentra en el cuerpo inferior, con una escalinata y puerta adintelada enmarcada por pilastras.



Bueno viajer@s, ¿habéis visitado alguna de estas torres/campanarios?. ¿Os gusta la historia del arte?. Desde este blog os animamos a que perdáis el miedo a las alturas y subáis a cada una de estas torres, las vistas merecen la pena.


1 comentario:

  1. ¡Qué pena! He de reconocer que solo he subido a la Giralda en Sevilla y hace tantos años ya... que necesito subir otra vez!!

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